Pasarela peatonal sobre río Rons-Xunqueira de Alba

Abstract

[Resumen:] El presente proyecto tiene por objeto la construcción de una pasarela peatonal sobre el río Rons, situado en la Xunqueira de Alba, Pontevedra, con el objetivo de unir los paseos fluviales de ambas márgenes del río, que actualmente se encuentran desconectados durante un tramo de unos 600 metros de longitud. El río Rons es un afluente del Lérez, las obras se proyectan en su tramo final que va desde las marismas del Alba hasta su desembocadura a la altura del Puente de las Corrientes. Esta zona recibe el nombre de Xunqueira de Alba, es un entorno natural cerca de la ciudad al que acude mucha gente para pasear, correr, montar en bici y más actividades lúdicas. El interés por la Xunqueira incrementa cuando en 2012 se aprueba el Decreto 190/2012, do 13 de setembro, polo que se aproba o Plan de Conservación do Espazo Natural de Interese Local Xunqueira de Alba. Entonces comienzan las acciones de la administración por restaurar y mejorar la zona, aprobando un plan de 195.000 euros para actuar en pasarelas, bancos, senderos y otras áreas del parque. Desde entonces se han llevado a cabo numerosas acciones de restauración incluyendo mejoras de paseos y la retirada de la pasarela de madera en el medio del tramo recto del río para su futura sustitución. Esto último ha dejado ambos paseos desconectados desde el puente al norte donde las marismas hasta la carretera al sur en la desembocadura con el Lérez. Es por esto que se proyecta la pasarela. La pasarela se ha proyectado en el tramo final del río, antes del ensanchamiento, se ha escogido esta posición porque permite recorrer ambos paseos en su totalidad y es la que tiene menor impacto ambiental y menor diferencia de cotas entre márgenes. Además se han valorado tres alternativas estructurales, de las cuales se ha escogido la segunda, una pasarela de celosías metálicas tipo Warren. La estructura es metálica, formada por dos celosías tipo Warren unidas por traviesas metálicas, todo ello formado con perfiles tubulares. Además se montarán cuatro cruces de San Andrés para reducir movimientos transversales. Sobre las traviesas se apoya un tablero de madera, conformado por viguetas longitudinales sobre las que se atornillan las tablas del pavimento. La pasarela salva 24 metros de vano y tiene un ancho libre de 2.8 metros. Para acceder a la pasarela se ha proyectado un pequeño desmonte en el margen oeste del río, por ser el que está en peores condiciones de los dos. Las cimentaciones se ejecutarán como encepados de micropilotes unidos por una viga centradora. Para la realización de las obras se prevé un plazo de ejecución de 3 meses.